Dos hermanos, basada en la novela Villa Laura de Sergio Dubcovsky, se centra en la relación conflictiva entre un hombre retraído y su avasallante hermana, que buscan saldar cuentas pendientes tras la muerte de la madre.
A pesar de caracterizar la película como "inclasificable" y "diferente" a sus seis largometrajes anteriores, Burman admite que tiene en común con el conjunto de su filmografía el tópico de la familia.
"Nunca he encontrado otro, no hay tantas otras cosas para hablar,
de dónde venimos...", señaló en una conferencia de prensa el ganador de dos Osos de Plata en la Berlinale de 2006 por su film El abrazo partido.
El nuevo proyecto se filmará a partir del lunes próximo durante tres semanas en la localidad uruguaya de Carmelo, para luego finalizar el rodaje durante un tiempo similar en Buenos Aires, con un presupuesto de 1,2 millones de dólares, según reveló a dpa el productor Sergio Dubkovsky.
Antonio Gasalla, sin querer entrar en detalles argumentales, destacó la amplitud de las posibilidades del tema. "Uno con un hermano no termina de conocerse nunca, por tener tanto en común, los padres, la infancia, parece que está todo sobreentendido, pero cuando son adultos se ve que no es así", señaló el actor. "Al reencontrarse,
cada uno de los personajes redescubre al otro, pero les cuesta
reinventar el vínculo."
Reconocido como uno de los comediantes más destacados del teatro y la televisión en Argentina, Gasalla tuvo un paso fugaz por el cine, aunque de fuerte impacto, con la caracterización de la anciana Mamá Cora de Esperando la carroza, de Alejandro Doria (1986).
"Esta es mi última película, hago una cada 25 años, no creo que en 25 años esté en condiciones de hacer otra", bromeó Gasalla.
Para Graciela Borges "el cine argentino le debía a Antonio (Gasalla) un film, o Antonio le debía al cine argentino, nunca tuvo un rol protagónico".
La actriz protagonizó en cambio numerosas películas, como El
dependiente (1969), de Leonardo Favio -a la que mencionó como emparentada con la que filmará ahora con Burman-, Crónica de una señora (de Raúl de la Torre, 1971) y más recientemente La Ciénaga (de Lucrecia Martel, 2001) y Las Manos (de Alejandro Doria, 2006).
"Ésta es una película de director", anticipó Borges, entusiasmada
también por los primeros ensayos con Gasalla. "A veces son más difíciles los silencios que las palabras, y Antonio es muy poderoso en los silencios", dijo la actriz, "en el cine, en los primeros planos, si no hay verdad, no hay mundos, no pasa nada."
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